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Real Jardín Botánico

Naturaleza y Calma

En el centro de Madrid hay un lugar apartado donde aún se puede disfrutar de la naturaleza y la calma. El Real Jardín Botánico es una caja de sorpresas para quienes se acercan a él, porque está lleno de hermosos rincones que contemplan más de dos siglos de historia. Además este espacio único introduce a los visitantes al conocimiento de una ciencia con largos años de tradición como la botánica. Las posibilidades que ofrece este edificio son muchas y variadas.

Declarado Jardín Artístico en 1942, sus colecciones incluyen un herbario excepcional con más de un millón de entradas, la biblioteca y el archivo, con casi 10,000 dibujos, así como la exhibición de 5,000 especies de plantas vivas.

Invernaderos

Se ofrecen visitas guiadas para conocer la multitud de especies que habitan en este rincón verde del centro de la ciudad, desde cebollas o rosas hasta las plantas más exóticas. La ruta a través del jardín y sus invernaderos combina contenido botánico general, curiosidades, historia, la singularidad de sus ejemplos, usos de las plantas y su importancia en nuestras vidas.

La ubicación actual del Jardín Botánico no es casual. Más bien, es el resultado del deseo del monarca ilustrado Carlos III de crear un complejo dedicado a las ciencias naturales en Madrid. Es por eso que está al lado de lo que ahora es el Museo del Prado, que fue construido a fines del siglo XVIII para albergar el Museo de Historia Natural. Su espíritu científico sigue vivo, ya que el jardín está gestionado actualmente por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas, que organiza todo tipo de actividades educativas, como conferencias y exposiciones.